Tráiler del film "De finde a Canarias" donde se relata la extraordinaria historia de dos cargos nacionales en Madrid del PP. Cada uno en su momento, viajaban a Canarias con cargo al erario público.
Coñas a parte... Empecemos!
sálvame, bibí ándersen
“En la política nada ocurre por casualidad. Si algo sucede, se puede estar seguro de que ha sido planeado asi”.
(Franklin D. Roosevelt)
En este post, no siguiendo al anterior, sí tomo una idea de él. Se hablaba de la versión oficial de un caso y de su versión propaganda correspondiente; de cómo llegar a la existencia de la oficial/real y a aproximarnos a su contenido.
Así, también cabe la distinción entre política real/nouménica y la fenomenología de la política. Esta distinción es una especie de física y metafísica de tal actividad y no una clarificación de su ejercicio en cuanto "esa noble y aristocrática actividad" o "esa depravación y degeneración institucionalizada". En otras palabras, es lo que venimos diciendo a cerca de la gran obra de teatro que es la política.
Hace 8-9 días, empecé a escribir este post y pretendía ordenar y documentar los hechos para intentar demostrar mi tesis o, al menos, mostrar su consistencia. A fecha de hoy, pienso que no hace falta. La cola que ha traído y sigue trayendo el caso resta necesidad de tal laboriosidad.
Hablamos del caso Monago. José Antonio Monago, presidente de la Junta de Extremadura y ex-senador por el PP. Le ponen en cuestión unos viajes con cargo al Senado de él y del sr. Carlos Muñoz, senador por Teruel. Dichos viajes se podrían justificar como ir a pasar el fin de semana al domicilio familiar, es decir, a casa de la compañera y pareja sentimental.
El debate inicial era: ¿por qué a Carlos lo dejan caer y a Monago lo quieren niquelar cuando los hechos son los mismos en ambos? ¿por qué son dos destinos, cuando es cosa de dos hombres y un destino?
Hay que destacar dos características distintivas para el sr. Monago: éste pasaba por un periodo de cese temporal de convivencia matrimonial en aquel entonces y ahora es presidente autonómico y de partido de la región extremeña. Lo primero le da un tinte morboso y sobre lo segundo ya sabéis mi teoría: los números uno hay que salvarlos como sea (como Mariano, Aguirre, Camps,...).
¿Y esto es para tanto? La verdad es que no. Pero en España existe el concepto "Sálvame". Sálvame es un programa televisivo que llena tardes y noches enteras de programación y se dedica a dar carnaza a la turba cual coliseo mediático: carreras de cuadrigas donde todo vale, suelta de leones a pobres indefensos caídos en desgracia, pelea de gladiadorcitos, payasetes, chonis, maltrabajas, pendejos y otras rarezas, incluso periodísticas, subproductos de deshecho de la sociedad española.
Sí. A ese nivel de aburrimiento y de devastación interior hemos llegado en España. El asunto es que el juego político que siguen los partidos políticos y Sálvame es el mismo. Por si no fuera poco con tener los partidos políticos que tenemos y su pésimo/¿? modo de gobernar (ya no nos quedan adjetivos adecuados para usar), por si no fuera poco la corrupción campante llegando a manifestarse el sistema corrupto per se y corruptor, por si no fuera poco todo eso, tenemos el cutre espectáculo que nos dan los mismos políticos y las tertulias políticas que se derivan.
Ya no solo es basura el periodismo y la televisión rosa, sino que los partidos, los políticos, la gobernanza y el periodismo político con sus tertulias televisadas también alcanzan la categoría de basura.
No solo seguimos asistiendo a la detonación controlada para derribar el sistema político y la estructura del Estado, sino que la basura sirve de sostén al propio infecto sistema.
Incrusto el vídeo que edité y pasaremos a un tema clave relevante en este asunto.
¡Cuántas energías nos hace malgastar el mundo!
Ya hablé del "Manual del buen político". Lo siguen a rajatabla. Podemos contemplar los mismos argumentos en las mismas reacciones a unos y a otros. Está todo bien estudiado y ese manual es de probada eficacia. La gente oye algo de alguien y se queda conformada. Nuestro natural no es de ser críticos. Cuando se nos enciende una luz de alarma entramos en modo sospecha, pero el modo natural es el modo confiado.
Es llamativo entonces cómo Jesús de Nazaret nos recomendaba estar siempre en vigilia, en alerta, como no sabiendo la hora ni el día en que el ladrón llega y se nos mete en casa. Parece todo como un sin-vivir, verdad?
¿Cómo se hace ese manual? Pues siguiendo el método científico. Sería lo suyo pensar la gran profesionalidad y rigurosidad de sus hacedores. Pero tal método no es el más adecuado y no voy a dar pistas que el diablo no es tonto.
Como iba diciendo, ese manual, como todos, no resiste a una actitud crítica. Y al estar en una época axial, la opinión pública empieza a estar resabiada, demasiado toreada en plaza, como para que sus recomendaciones, directrices y técnicas sean suficientemente eficaces. Así pues, necesitamos actualizar el manual para seguir "engañando" a la gente durante otros 40 años u otros 40 ciclos de 40 años.
Con Monago se está poniendo de manifiesto la crisis del "Manual". No es la primera vez. Cuando el "Manual" no da de sí o se acumulan demasiados errores como para salir airoso, se produce un cambio de "perros" en el poder pero siempre con el mismo collar.
En el PP, cuando el "Manual" no da de sí, aparece el último recurso: Javier Arenas. En las segundas elecciones que Mariano perdió ante Zapatero, Rajoy estaba hecho polvo, agotado, quemado, con la medicación algo desajustada y queriendo tirar la toalla. Arenas le dio un parche de cafeína y continuó: se fue de vacaciones a México (según las malas lenguas, a someterse a una reconstrucción interior masónica, valga la expresión), estuvo en out side la primera mitad de la legislatura y, con la crisis, volvió a la carga.
Cuando Mariano tuvo que hablar a su cúpula, viéndolo nosotros a través de una ventanita de plasma, ¿os acordáis?, Arenas salía en la foto. Hace poco, al salir el caso Púnica, Rajoy tuvo que comparecer. Antes y durante, Arenas estaba en escena. Destaco que en los tres casos, Mariano flaquea. También en el último.
Ahora, a la semana de colear el caso Monago, Arenas también se ha hecho notar.
¿Cuál es el recurso Arenas cuando se acaban los recursos? Hacer una demostración de fuerza sansónica de extrema contundencia, dar un puñetazo en la mesa y huir hacia adelante pero como si no ocurriese nada, como si así se pusiera todo en orden, el gallinero callara y se pusieran todas a poner huevos.
Bueno. Es un modo de retrasar la catástrofe, cada vez más catastrófica. Una especie de paracaídas de emergencia que cada vez tarda más en abrirse y la tragedia se antoja inevitable. Al final, tendrán que hacer tanta fuerza que reventarán, como quien hace fuerza y se caga encima. Veremos ya, hecho fenómeno, su interior: el interior del PP es mera y pura mierda.
La cuestión es que ante la excesiva permanencia de Monago en los "Sálvame diario" políticos y con tantas indicaciones manualísticas, al señor se le ha ido esto de las manos y lo llevan, los suyos, como "'mondongo' por acequia".
¿Es positivo esto? ¿Ha valido la pena la "operación Monago"? Para quien mueve los hilos, sea cual sea el resultado, siempre vale la pena. Como podemos comprobar, ahí tenemos Sálvame diario todas las tardes en la "cadena amiga" y Sálvame deluxe el viernes-noche con éxito de audiencia después de años aún sabiéndose basura.
Es difícil vencer al mundo, verdad? Este mundo tiene su Príncipe. Y el otro, su Rey. ¿Quién querrá que el Rey reine en el Principado?
Repito: hay que hacer de nuevo el manual y sus hacedores tienen una trampa en la que no deben caer: lo que sea criticable no sirve. Ante la aplicación del "Manual", éste debe pasar desapercibido y así no activar el modo sospecha/crítico de la gente.
Es decir, el "Manual" no puede ser predecible, no puede ser objeto de estudio. Por consiguiente, toda crítica provoca su modificación y perfeccionamiento, en vez de su desactivación.
Mmmm! De este final de post me salen unos cuatro más.
Para empezar, inserto el trailer de "La batalla por la no-responsabilidad" que próximamente llegará a las mejores pantallas, las de los mejores internautas. Basada en hechos reales: el caso Ébola.
Es posible que me salga mejor el trailer que la película. Todo se verá. De momento, publico en este post la quinta entrega temática sobre estos sucesos. Se trataron temas como las mentiras, la (no)transparencia, la (i)responsabilidad, la dialéctica y, ahora, se trata de ver la gobernanza y su gestión política.
eternamente inocente, fangoria
Siendo los hechos susceptibles de ser ordenados en una línea temporal tal como van saliendo caóticamente anoticiados a la opinión pública, la oficialidad genera una versión de cara a la galería que lejos de ser oficial es pura propaganda.
Si a veces es difícil mantener la templanza para entresacar los hechos de las noticias, bien porque ningún medio es neutral y aséptico 100%, bien porque el ambiente indignado pueda usar los hechos como armas antes del análisis, nos encontramos que la versión propagandística de la oficialidad (Gobierno de la nación) hace opaca a la versión oficial.
¿Cómo se sabe eso si nos es opaca? Sin entrar en consideraciones teórico-filosóficas a cerca del método científico y la epistemología, precisamente al ordenar las noticias sin precipitarse se ve que no cuadran las cosas. Un segundo modo más sencillo sería, si se conoce el modus operandi de los que llegan al poder estando en el poder, valga la expresión, fácilmente se ve si siguen igual de impenitentes. El tercer modo, más simple, es conocer los hechos por la investigación paralela de los periodistas, siempre, eso sí, siendo críticos ante todo, sea oficial u oficiosa.
Actitud crítica que no significa poner en duda todo sino saber destilar la verdad de todo ese "mar de tinta" sino distinguir lo que es ensalada, aliño o cocido y dejar pasar el tiempo para que lo precipitado y falso precipite (valga la aparente redundancia) y poderse desechar.
De los medios independientes (serios y sin condicionantes financieros o políticos), pequeños y alternativos podemos conocer lo que nadie se atreve a decir. A la vez que los hay sensacionalistas y dados a generar confusión. Esto último suele ser muy favorable a la oficialidad.
Si con Felipe González aprendimos cómo se puede estar horas hablando sin decir nada, con la llegada a la Moncloa de Zapatero nos dimos cuenta del intercambio de papeles con el cambio de roles de los (dos) partidos del sistema. El manual del buen político es uno, siempre el mismo. En ese manual se definen dos posiciones: la del Gobierno y la de la oposición, independientemente del partido que sea. Por eso, y por otras cosas demostrables con las matemáticas, hablamos del partido único llamado PPSOE (= PP + PSOE), hablamos de corrupción sistémica y acabamos finalmente señalando, como pieza que falta, a la punta de la pirámide, el rJCI.
Bueno, si sigo por esa tangente se llega a ver cómo Rajoy ha reventado el juego entre los dos partidos yendo más allá de sus límites. Juego que ellos llaman "democracia en versión española". Por eso decimos: "lo llaman democracia y no lo es" y eso de "democracia real ya!". Etc. etc.
Volviendo al hilo, hay un cuarto modo de saber que hay una versión oficial que nos es opaca en contraposición a la versión propagandística de la oficialidad: los errores políticos.
¿Por qué no creo en las utopías? Porque impepinable e indefectiblemente siempre, y siempre es siempre, se cometen errores. Siempre!
Las utopías siempre tienen una lógica perfecta. Lo que ocurre es que siempre, y siempre es siempre, toda lógica es limitada. Siempre! La perfección de lo que concebimos sólo se da si reducimos la Realidad, si ponemos puertas al campo. Y la Realidad no se reduce porque dejemos de considerarla infinita. Por eso la verdadera ley es la ley del Amor y no la ley de la Razón. Siendo la ley del amor propiamente no-ley, porque ley es obra de la Razón. El verdadero Conocimiento tiene al Amor como fuente y no a la Razón, la Ley o la racionalización.
Sobre la insostenibilidad de las utopías tenemos multitud de películas que nos hablan de ello. Por ejemplo, "Yo, robot", "Las mujeres perfectas", el mismo "Matrix",... O esas películas en las que se pone en valor lo "imperfecto" en cuanto que se sale de los cánones. O las que nos hablan de cómo finalmente el amor salva cualquier obstáculo o diferencia. Etc. etc.
¿Cuál es el error político cometido en el caso Ébola? Todos estaríamos de acuerdo, a estas alturas de la película, en que son varios: la falta de medios debido al recorte presupuestario sumidos en esta grave crisis económica; la improvisación por haber pillado a todos por sorpresa el primer contagio mundial fuera del continente africano; la supuesta ineptitud de la ministra de sanidad para coordinar un operativo de tal envergadura; y el repatriar precipitadamente a dos enfermos de ébola en fase terminal sin prácticamente ninguna posibilidad de cura.
Todo ese cúmulo de errores sólo es posible en España. Sería inconcebible pues que no hubieran ceses y dimisiones para asumir y depurar responsabilidades políticas. Y también sólo en España es posible que permanezcan aferrándose a sus cargos los irresponsables.
¿Cómo es posible que aparentemente nadie asuma responsabilidades políticas? Sencillamente porque no lo llegan ni a concebir, el algo que no entra en sus esquemas. Para ellos, los políticos no cometen errores; aprenden de las experiencias. Y quienes se juegan la vida son los profesionales y los técnicos.
Podríamos decir que "es duro e injusto". Sí, pero es lo que hay. Si alguien ha tenido un jefe "medio politiquero" se hará cargo de la situación. Haber tenido un jefe así es haber estado en una posición privilegiada para ver esos teatros tanto en los ensayos como entre bastidores.
Pero... no es nada de todo esto, aunque también. El error político no es ninguno de los enumerados aunque en verdad se hallan dado. Porque la política no es lo que estamos suponiendo y considerando.
Somos espectadores ante un cúmulo increíble de despropósitos indignantes en donde no hay por donde coger las cosas. ¿Cómo es posible (podríamos insistir)? Pues es bien fácil. Sólo hay que cambiar el concepto de política. Solo que no sea tan fácil cambiar y/o que no sea tan fácil de explicar e ilustrar bien.
¿Cuál ha sido pues el verdadero error político? La preocupación buena de la ministra por servir a su pueblo, por ser la única en el PP que se cree esa ingenuidad de la función política. Sí, como lo lees. La ministra es una señora que quiere hacer bien su trabajo. Y por ese error se derrumba la utopía. Porque la política ha pasado a ser otra cosa, si no es que siempre ha sido así.
Siempre he pensado que los católicos en medio del mundo son los tontos. No puedo más que reírme al ver ayer a Rajoy reivindicando "la política como la actividad noble que es" (sic) y lavando la cara por enésima vez al partido. Sin hablar de los abrazos de Mariano y Cospedal a Monago (esta imagen da para varios posts y son otro tema).
Prefiero hacer posts cortos y siempre me paso de la raya. Así que reanudaré este tema en el próximo post, que la cosa promete, verdad?
Ahora dejo la quinta entrega del caso ébola en España que quizás ofrezca alguna pista.
En varios posts he estado dando razones por las cuales nadie dimite en la política española. Ni dimiten, ni sanean la corrupción, ni nada de nada. Tampoco dimiten por mentir, ni por errar los cálculos presupuestarios, ni por regalar nuestra soberanía a otros países, a la llamada Troika y a los mercados financieros, y ni tienen vergüenza de verse y oírse en el Parlamento.
Hay razones personales de falta de autoridad de Naniano Rajoy, razones ideológicas (la ideología de institución) y hay razones de unidad corporativa o "cupulativa" (de cúpula). Hay razones legislativas por las que "nadie prodá podrá probar que no es inocente". El mismo presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial dice que la legislación está pensada para el robagallinas y no para el gran defraudador.
Lo penoso de España, en primer lugar, no es la corrupción. Es la estructura económica y empresarial, el modelo productivo. De ello se deriva la especial gravedad de la crisis. En segundo lugar está su mala gestión y el riesgo de inversiones no asumidos. En tercer lugar está la corrupción sistémica y generalizada. No de balde heredamos la cultura de la picaresca. Y en cuarto lugar está el fraticidio y cainismo todavía coleando en España.
Puede haber otro pensar, de mayor profundidad, en la que la corrupción pase a la primera posición, a ser el principal y fundamental problema. No tanto la corrupción sino las razones por las que se posibilita.
Respecto al sistema corruptor, la raíz la tenemos en el rey JCI, como no puede ser de otro modo. Siendo el máximo responsable, por ley, es absolutamente irresponsable. Este régimen supuestamente democrático que gozamos (/sufrimos) nace con la Transición en el 78. Luego en ese umbral situamos la primera causa. No le haríamos justicia a JCI si no comprendiésemos su complicada situación ya en tiempos de Franco y en la propia Transición.
Siento decirlo, pero el rey no tuvo la calidad moral suficiente para poner orden y concierto, nunca mejor dicho, a esa orquesta de instrumentos desafinados. Sus herramientas eran la "campechanía", la "juerga y la diversión".
La gravedad de la crisis económica viene de que España es un país de albañiles y camareros. Los albañiles se han ido al paro y no se sabe cuando volverán a tener trabajo. En los años 20 del pasado siglo, en las escuelas enseñaban que "España era un país pobre, agrícola y ganadero". El éxodo rural abasteció de mano de obra a la industria, un sector en auge desde los 50 y desmantelado desde los 80.
Justamente hoy, los grandes empresarios salen en los noticieros presentando un plan para crear empleo hasta 2018. Justamente hoy, lunes, después de la semana horribilis para el PP y para el (des)Gobierno de España. Podrían haberlo hecho 6 ó 7 años antes, por ejemplo. ¿Por qué me habrá tocado ser español en esta vida? (es retórica).
Y en tercer lugar, la nefasta gestión de la crisis se debe a la carga los fracasos empresariales y financieros sobre quienes no son ni empresarios ni financieros. Rescatamos entidades financieras quebradas, apuntalamos negocios financieros fracasados y aseguramos la rentabilidad de decisiones erróneas. Por supuesto que las rescatamos con dinero público, de todos.
Hay que asegurar los ingresos a la banca extranjera (sobretodo la alemana) por comprar deuda de estados quebrados. Hay que pagar unos intereses abusivos según marcan los mercados otorgándoles nuestra soberanía. Hay que cubrir la morosidad de préstamos a amiguetes, los abusos de la banca en vender hipotecas, las decisiones políticas faraónicas para mayor gloria del politicucho de turno más votado, el analfabetismo financiero de los responsables de las Cajas de Ahorro y Montes de Piedad, la falta de estudios de viabilidad del sector inmobiliario y del financiero que lo financia (valga la expresión). Etc. etc.
Con el agravante de nos mean y nos insultan en la cara: despilfarros, caprichos de lujo, sustracción y evasión de capitales, fraude fiscal, descapitalizar empresas para aumentar las arcas personales, colecciones de coches cochazos, chóferes, mansiones, prebendas, trafico e influencias, saqueo público, "extorsión" a empresarios cuya actividad esté relacionada con el ente público,... y lo que todavía no se sabe o nunca se sabrá. Y para más inri, nuestro Mariano Rajoy agrediendo gravemente a nuestra inteligencia.
En Valencia, cuando empezó esto de la Gürtel e imputaron a Camps, Betoret y Costa, el PP de la Comunidad Valenciana y el Consell de la Generalitat se creían un buque acorazado imposible de hundir. Ahora los imputados del PP en escaños de las Cortes Valencianas son 2/3 del grupo popular y ahí siguen. Eso sí, ha habido un cabeza de turco: Blasco, cuyo origen es el socialismo y viajó a la derecha para instalarse otra vez en el poder con el PP. Era de la casta pero no de nacimiento.
Valencia era modélica para Rajoy y él sigue ese modelo: o nadie cae de los que no deben caer o caemos todos, posibilidad esta última que no conciben. Ahora con Podemos empiezan a acojonarse. Más acojonados cuanto más inmunes se creían.
Pero hay un cuarto tipo de razones por las que nadie dimite. Es la degeneración de la lucha entre los dos partidos principales. En España seguimos siendo fratricidas y cainitas. La división de las dos españas se ha agravado en los últimos 10-15 años. Las dos españas que se enfrentaron en la Guerra Civil del 36. Los mismos que cuando era pequeño parecían tener las heridas cerradas, del bando nacional o franquista, se les volvieron a abrir con Zapatero y la Memoria Histórica. Sigo sin salir de mi asombro.
Ese vicio se vive dentro de los partidos, pero sobretodo entre los dos grandes partidos PP y PSOE. Nadie va a dimitir de primeras porque empezarían a "dispararse" entre ellos en los juzgados y no quedaría nadie en pie. Así mantienen una tensa complicidad.
En el cara a cara Rubalcaba-Rajoy del que analizamos los tics dichosos, se puede ver el juego que llevan entre ellos. Cosa que Rajoy aprovecha para machacar a Rubalcaba. Éste dice la verdad y juega limpio. Sin embargo, es Rajoy quien "gana" el debate con mentiras y malas artes (si alguien quiere verlo, que me escriba).
¿Queda algo sano en España? No sé. La política, se mire por donde se mire, es un auténtico zombi. Y las instituciones del Estado están todas para el arrastre. En el Tribunal de Cuentas solo emplean a familiares para no hacer nada. El poder judicial lo controlan los políticos y también hay indicios de corrupción. El cabeza de turco ha sido un pobre hombre: el juez Dívar. El hombre tenía la costumbre de cenar en Marbella con su jefe de seguridad. Es decir, le dieron un "navajazo" a este hombre. Etc. etc.
Esto es así. No es que sea un cenizo. Es un cambio de régimen: se derrumba el antiguo y veremos lo que aparece.
Y acabo. Debería documentar todo esto y desarrollar algunas cosas. Pero esto es lo que hay.
Para demostrar la corrupción institucional, corporativa y cupulativa del Partido Popular, nadie mejor que Rajoy para que nos la explique.
Os dejo el vídeo de su famosa primera comparecencia a través de un televisor de plasma. Él mismo confirma la contabilidad B, la veracidad de los papeles de Bárcenas, reconoce que cobró dinero negro y alguna perla más.
Ah! Y para quien quiera saber lo que piensa Rajoy sobre el proceso catalán, encontrará un vídeo en el canal de Youtube.
Pie de foto: Las murallas de Jericó se derribaron tocando las trompetas.
Hay gente que es "fuerte". Recuerdo un tiempo en que un allegado me hablaba de dar puñetazos en la mesa, lo que en el plano de la dialéctica política se le suele llamar como contundencia. Para ser jefe o liderar un proyecto se pueden encontrar varios modelos. Está el clásico de siempre de ser el supervisor de todo, el "decisor" de todo, con una concepción negativa de las personas subordinadas y creyéndose en la necesidad de sacar el "látigo" de vez en cuando, con motivo o por si acaso.
Es muy cansino eso. Dar un primer puñetazo en la mesa casi te obliga a adoptar ese modelo de por vida. Se debe tener una fachada con apariencia de "duro y temeroso" sin fisuras. En cuanto se vislumbra el más mínimo haz de luz por una pequeña grieta, la muralla de la fortaleza se acaba convirtiendo en ruinas. No sé hasta qué punto puede deteriorar a esas personas. No se puede tener una doble vida por mucho tiempo. La del trabajo, si no tiene marcha atrás, acabará dominando. Es algo así como una deformación profesional.
¿Qué le pasa a esa gente? ¿Por qué piensa que si empatiza y hace equipo se le van a subir a las barbas? ¿Tan poca cosa es? Si le viene grande la puesto que recule. Pero el orgullo está para algo. Cuanto más mindundi es alguien, más necesidad tiene de hacerse esa muralla y cuanto más miedo tenga, más grande e inexpugnable será.
Sin embargo, en la debilidad de la no defensa se establecen lazos que son más fuertes. Así, la fortaleza de una muralla defensiva y ofensiva es más débil que la debilidad de la desnudez con esos lazos fuertes. La primera es una fortaleza falsa, la segunda es la fortaleza verdadera.
Mover el mundo con una muralla, supone ser más que un hércules. Es como ser eje y, con una fuerza descomunal, hacer rotar al planeta mismo en reposo. Y eso es hacer mucha fuerza. Un astrofísico nos lo podría decir con precisión.
Para mover el mundo también está el instrumento llamado ideología. Es una estructura mental externa que nos sostiene. Como un exoesqueleto; como un robot gigante que se pilota desde la cabina situada en el pecho o cabeza del robot. Cuando era pequeño sacaban por la tele a Maziger Z. O un avión de guerra, un tanque,... o un martillo. La ideología es un instrumento para la persona.
Una persona que mueve el mundo con amor, desde la desnudez, no necesita ideologías, no necesita mover el mundo porque parece que se mueve solo y sin esfuerzo. Las ideologías dan apariencia de eficacia, de contundencia, de luchar eficientemente por conquistar objetivos y metas, para alcanzar logros de manera rápida y exitosa,... incluso parece hacer modélica a cualquier persona. Este por ejemplo es el "misterio" de los masones y demás sociedades de esa calaña.
En la Historia han habido personajes inteligentes que han creado ideologías o han sido fuente de ellas. Parece claro que el retorno al amor no siempre es una opción considerada.
Hemos visto que la ideología de género hace fuertes a feministas y al colectivo LGBTI. La ideología liberal hace fuertes a los agentes de mercado mejor posicionados. Es la ley del más fuerte pero en la economía de mercado. Muy diferente del aséptico modelo teórico de mercado. La ideología capitalista hace fuerte a quien tiene el capital.
La ideología de institución hace fuertes que quienes se cobijan ellas. Necesitan ese cobijo ante la incapacidad de tender lazos. Como decía hace dos posts, la institución representa en grado sumo y excelso todo lo contrario de las carencias de los miembros. Bajo su amparo y resguardo se puede hacer de todo, incluso las ocurrencias de un corazón miserable. El fin justifica los medios para defenderla o para atacar desde ella. Sirve para justificar cualquier golpe bajo, cualquier mezquindad, cualquier mentira, para amparar a cualquier depravado y como escudo de defensa para neutralizar cualquier "ataque".
Esa es la falsa fortaleza del Partido Popular, por ejemplo. Ese es su truco, su artimaña. La institución, en cuanto creación humana, el hombre es responsable de ella. Pero según la ideología de institución, ésta es siempre no culpable, irresponsable, no es responsable de lo que sus miembros puedan hacer sirviéndose de ella. Este es el "misterio" legislativo al cual se amparan ahora los peperos de alto standing, los castuzos. Y necesitan de un chivo expiatorio o escupidera.
La institución es irresponsable, sí. Pero sin embargo, la realidad y la verdad es que los hombres son responsables de lo que la institución posibilita en cuanto a los actos fraudulentos de sus miembros.
Estas son las razones por las cuales Esperanza Aguirre, por ejemplo, no dimite ahora; O Cospedal defiende al partido aunque tenga que decir cosas como "es un pago en diferido justificado con nóminas de lo que sería un despido y una indemnización y que, por lo tanto, no cotizaban a la Seguridad Social". Y, además dicen que no han hecho nada malo. Sólo el chivo es el malo. En fin, una visión muy plana, baja y miserable de la ética y el honor.
En España tenemos tres instituciones principales, al menos, las cuales son irresponsables. Son como las tres patas que sostienen y dan estabilidad al Estado. Estas son la Casa Real y los partidos políticos, en especial los dos mayoritarios que conforman el sistema bipartidista de alternancia en el poder: el Partido Popular, PP, y el Partido Socialista Obrero Español, PSOE. Irresponsabilidad ideológica de los pilares que junto a la no-separación de poderes hacen del Estado un Estado corrupto per se. Tan corrupto que ahora está reventando por todos lados. Levantas una piedra y emana un geiser de mierda e inmundicia.
Decía también que la ideología de institución pretende imitar a la Iglesia que es una institución que se les "antoja" eterna. Así, la Casa Real y los partidos políticos creen que se van a eternizar. Pero... los géiseres con los géiseres. Son la señal que esperábamos.
Aunque, muy a pesar de ellos, se da unainversión de la realidad. Los fieles de la Iglesia no son creadores de la misma. La Iglesia es una realidad mística anterior a sus miembros. Y las instituciones civiles son creaciones de los hombres. La Iglesia en cuanto tal es un ente vivo y las instituciones civiles son entes sin vida propia. Por mucho que le gustaría a Blesa ahora. También es cierto que hay fieles de la Iglesia que se toman a la Iglesia como una institución a la que se le puede aplicar esta ideología.
Dicho esto...
Los de mi generación, de niños, veíamos "la Bola de cristal". Era un programa infantil hecho por los de la movida madrileña. Algo insólito cuyo producto fue algo genial.
En un episodio, los guiñoles formaron el Gobierno de su nación. Parece que estuviera pensado para los tiempos que corren y no de hace 35 años. También es cierto que en aquel entonces éramos inconscientes a las realidades políticas.
Espero que os guste. El vídeo no es gratuito; está relacionado. Lo que ocurre son dos cosas: si digo algo os lo anticipo; y ya es demasiado largo el post.